Letras invisibles.

Encendió su pipa y todo el ambiente se lleno se un suave aroma a tabaco, una mezcla de maderas y whisky. Sentado en aquel sofá observaba entre sus gafas los libros de aquella enorme biblioteca. Era una sala circular y el estaba en medio, dando pequeños sorbos a su pipa tallada y exhalando pequeñas bocanadas de humo que volaban hasta la enorme lampara de araña del techo que se fundía con los cristales dando un ambiente digno del Londres colonial.

Era posible que hubiese leído todos los que le rodeaban, cientos y cientos de libros de todo tipo, muchos de ellos llenos de aventuras, de dolor, de pasiones encontradas, de biografías imposibles e incluso de temáticas donde solo abrir el libro es motivo para desistir, pero leer siempre fue su pasión, navegar entre todos aquellos autores y vivir intensamente cada relato como si fuera el el protagonista.

De pronto su mirada se detuvo en uno..uno diferente, un libro de pastas negras y hojas blancas. Apoyó la pipa en el cenicero y se levantó con animo de cogerlo de entre los libros. Por mucho que intentara recordar, no podía saber de donde era aquel libro extraño. Lo agarró entre sus manos y lo abrió.

Empezó a hojearlo detenidamente, y lo que mas le sorprendió es que estaba en blanco, ni siquiera tenía un título que lo diera nombre, solo el contraste monocromo era lo que podía ver.

Lo primero que pensó es que no podía ser, el tenía buena memoria, recordaba hasta los apuntes en los márgenes de algunas publicaciones..pero aquel libro, no tenía nada. Comenzó a mesar sus barbas con inquietud y a pasar las hojas con rapidez, cuanto mas rápido las pasaba, mas nervioso se ponía, porque no encontraba letras que leer.

Desesperado por no hallar mas que el vacío en medio de tanta cultura, se desplomó sobre el suelo dejándose caer junto al libro . No podía comprender, y lo peor del ser humano es no entender lo que quiere encontrar explicación. Miró de nuevo el libro y abriéndolo con rabia lo lanzo contra la estantería.

Por un momento sintió alivio, pero fue solo un momento, pues pronto notó dolor, un escozor en su mano. La sangre brotaba de un corte provocado por una de las hojas que de manera limpia le secciono una de las venas al arrojarlo contra los otros libros.

Poco a poco se fue desangrando, sin poder parar aquella hemorragia , si, poco a poco su luz se fue extinguiendo hasta desaparecer su alma.

Cuando lo encontraron ya sin vida, en medio de aquella sala redonda, su mano rígida señalaba hacia un libro, y ese libro, ya tenía letras , abierto por una página que en letras rojas decía ..¨Si me buscas y no sabes encontrarme estas perdido¨.

esculturas-con-libros-tallados-01

Publicado por elbauldeguardian

Adventure, Passion and live!!..

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