IRIS.

Se quedó mirando fijamente a aquella estrella, sin parpadear, el brillo de sus ojos reflejaban la luz de la Luna mientras esperaba ver pasar una Estrella fugaz , así como cada noche, escudriñando en la oscuridad, sin ceder ante su cansancio.A pesar de que hacía frío, a pesar de que el viento hacia estremecer las hojas de los eucaliptos y estas hablaban susurrando a la noche, a pesar de ser tan tarde, ella no quería perder de vista su estrella , su deseo más profundo era poder cazarla y domarla para hacerla participe de sus anhelos.

Pasaban las horas, y la estrella anhelada no aparecía . La Luna la miraba con tristeza , pues veía en ella a una luchadora, una gladiadora de la vida capaz de luchar en la arena del Circo con su tridente y su red , alguien que se podía levantar una y otra vez pese a los golpes del destino.

Iris se abrazó a sí misma , un ligero escalofrío recorrió su frágil figura, a la vez que por un momento cerró los párpados dejando escurrir una pequeña lágrima por su mejilla. Esa insignificante gota salada salida de uno de sus preciosos ojos rasgados resbaló por su sonrosada mejilla yendo a parar a sus labios. Su sabor la hizo recordar porque estaba allí , la vida aunque grata en muchos momentos , en otros tantos se había vuelto ingrata y cruel, cuantas veces había escuchado …» La vida no es justa » , y ella, en su afán por entender sonreía y cruzaba la calle como si nada mientras su corazón se ahogaba en un puño. 

Su nombre delataba lo que era, parte del ojo que todo lo ve, reflejo de quién tiene de frente, paño de sus lágrimas y espejo de su Alma, por eso la llamaban Iris, porque aún a pesar de encontrarse muchas veces con el mundo en contra , con trabajos ingratos , con traiciones y personas sin escrúpulos, nunca perdía el brillo de su mirada.

Soñaba y sus sueños eran tan intensos como el latido de su corazón , rendirse era una palabra que no estaba en su diccionario , sentía que podía ser la cola de aquella Estrella fugaz e iluminar con su estela el manto de la noche.

De nuevo abrió los ojos, a la vez que dejaba escapar una enorme sonrisa , allí estaba frente a ella invitándola a subir, con toda su luz . Según montaba en aquella enorme Estrella sintió como flotaba sobre todas aquellas cosas que antes pesaban sobre ella, era capaz de hacer el Amor a la Luna y arroparse con Sol, podía volar sin alas y aullar al Mundo rodeada de energía , la misma que hizo que nunca se rindiera por ver cumplidos sus sueños.