Fuego…Ese fuego siempre había estado dentro, escondido entre las ascuas del corazón , latiendo y alimentando cada suspiro, exhalando vapor como fumarolas de un volcán .
Ardía por dentro , un fuego que consumía sus entrañas y hacía que se estremeciera de una manera como nunca lo había sentido, arrodillándose en el suelo con las manos sobre su barriga, su pecho, su cabeza, sin poder localizar el origen de aquel calor inmenso, nunca creyó que aquello fuera posible pues su corazón albergaba hielo y piedra .
Por un momento perdió el sentido.
Vio su cuerpo ardiendo en la noche mientras unas sombras observaban y señalaban su iluminada figura por las llamas. Intentaba gritar más no salía sonido alguno por su boca , solo un gemido ahogado mezclado por el humo.
Era un sueño ? Su sentimiento era real ?
El fuego siguió avanzando hasta no ver nada, sus pupilas dilatadas reflejaban el brillo dorado de las llamas , pero algo estaba ocurriendo porque su carne no ardía , su cabello seguía moviéndose al son del viento jugando entre el ardor y el calor , sus manos se entrelazaban con las llamas como queriendo dar la mano a lo desconocido .
Despertó …
Al abrir los ojos se quedó mirando al cielo , todo había sido un sueño, pero seguía sintiendo ese ardor por dentro, algo imposible de apagar, un fuego que hacía que hasta el agua de sus ojos se evaporara .
Tocó su corazón y notó que este latía con muchísima fuerza, presentía más fuego, mucho más de que sintió en su desvanecimiento , estaba muy cerca, tanto que comenzó a sudar, la ropa molestaba , hasta los árboles de su entorno parecían quebrarse a su alrededor mientras el suelo vibraba temblando como si se fuera a abrir .
Giró de repente y allí estaba un enorme remolino de fuego que la invitaba a entrar sin poder decir que no, sin la oportunidad de decidir , aquel remolino reclamaba las llamas de su interior.
Extendió los brazos y se dejó envolver por el fuego convirtiéndose en un solo tornado de llamas y calor desplazándose hasta el cielo.
Cuentan que cada cierto tiempo se puede ver una estrella con cola de fuego que recuerda que la llama siempre está encendida, solo hay que avivar las llamas .